El pasado mes de agosto murió Vladimir Golubnichi, varias veces medallista olímpico y, sobre todo, vencedor de aquellos agónicos 20 km de los Juegos de México de 1968. La noticia de su fallecimiento saltó a los medios y nada más conocerla escribí algo aquí mismo en Facebook. El cuarto en aquella carrera fue el norteamericano Rudy Haluza. Hasta la fase final de la prueba Haluza estuvo luchando con el mejicano José Pedraza por la medalla de bronce. A la historia del norteamericano le dediqué un capítulo de Correr es de cobardes. El norteamericano fue, dicho por él mismo "el hombre que perdió una medalla y salvó un estadio". La última consecuencia de aquella historia la he vivido hoy. Rudy Haluza murió el pasado septiembre, un mes después de Golubnichi, pero yo me he enterado con cuatro de retraso.
