sábado, 4 de noviembre de 2006

Y aquí, una declaración de principios

Así de sencillo:
"¿Son muchos en el mundo los que saben lanzar el martillo, saltar con la pértiga o del trampolín de esquí? Claro que no. En cambio, con una mínima preparación, cualquiera de nosotros es capaz de participar en competiciones de marcha. Es más, casi a diario tenemos la oportunidad de entrenarnos en ese deporte. Cuando estamos apurados por llegar al trabajo, apretamos el paso; al ver un autobús acercándose a la parada, echamos a andar rápido. Todo esto induce a pensar en lo siguiente: el campeón mundial, digamos en lanzamiento de martillo, es campeón entre un limitado número de colegas suyos: el campeón mundial en sable es el mejor sablista de un poco numeroso contingente de sablistas; empero, el campeón mundial de marcha es campeón de todos nosotros."
E. Bogatiriov (1980)