La idea era que este blog fuese un lugar en el que intercambiar alegrías. Hoy, sin embargo, me entero de la muerte de Yvon Perreau. Yvon era uno de esos amigos que uno va haciendo por el mundo y a los que llega a apreciar a pesar de que solo ve un par veces al año y ni siquiera es capaz de recordar su nombre. En el foro de Marchons.com abierto en su homenaje dejo estas líneas.
Me gustaría poder escribir esto en francés, pero mi dominio de esta lengua no es lo suficientemente grande para poder expresar con ella la tristeza que siento por la muerte de Yvon. Le recuerdo de mis diferentes participaciones en los circuitos selectivos y, sobre todo, en la París-Colmar. No puedo evitar esbozar una sonrisa cada vez que recuerdo aquella vez -fue en la París-Colmar de 2000-, cuando, al llegar a un pequeño pueblo en cuyas calles no había apenas un alma, Yvon, que estaba allí con su coche, tomó el megáfono y se puso a llamar la atención de todo el mundo anunciando mi paso. Gracias, Yvon, amigo.
En la foto, Yvon (a la derecha) en la entrega de premios de una de las últimas ediciones de la París-Colmar en compañía de su esposa Marinette y de Gregorz A.Urbanowski.
1 comments:
Cuando pasa la tristeza, queda la alegría de haber tenido la suerte de conocer a personas como ésa. Un beso.
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