La experiencia y todo eso

Echo un vistazo a mi cuaderno de entrenamientos y descubro, no sin algo de sopresa, que ya llevo 23 días consecutivos saliendo a la calle a marchar. (A Roubaix fui con 70, y para las pruebas de gran fondo de final de invierno todavía quedan más de 90.) Claro que en esos 23 días he hecho 184 kilómetros, o sea, ocho por día. Es lo que pasa cuando uno va cumpliendo años a la vez que kilómetros (experiencia se llama a todo eso cuando va junto). Antes dejaba de entrenar tres días y ya creía que tenía que volver a empezar de cero. Ahora entreno una semana seguida y ya me veo capaz de hacer un 50.