En el foro de AEMA, a requerimiento de Joaquín Martín, vamos aportando nuestras particulares visiones sobre el problema del juicio de la marcha.
¿Cómo es posible que de pronto se descalifique a un marchador que nunca antes ha sido descalificado? Y viceversa. ¿Acaso un atleta no tiene siempre el mismo marchar? ¿Acaso los jueces no aplican siempre el mismo criterio? Aquí intervengo yo. En mi línea habitual, como es de suponer.
¿Cómo es posible que de pronto se descalifique a un marchador que nunca antes ha sido descalificado? Y viceversa. ¿Acaso un atleta no tiene siempre el mismo marchar? ¿Acaso los jueces no aplican siempre el mismo criterio? Aquí intervengo yo. En mi línea habitual, como es de suponer.
Foto cortesía Multimediavisini.
El problema, a mi juicio, es que el reglamento no está hecho para favorecer al atleta sino para favorecer al juez. Las últimas modificaciones han ido en esta línea. Por una parte, visto que era difícil a veces establecer cuándo la flexión era reglamentaria y cuándo infringía la norma, se decidió eliminarla completamente. (Fin del problema.) Y en lo que se refiere a la pérdida de contacto se decidió establecer por decreto que el juez siempre tiene razón. No hay una norma general. Un marchador marcha mal si el juez dice que marcha mal. Y dado que ningún otro elemento de juicio es válido, no hay discusión posible. El juez es infalible y no se le puede pedir que rinda cuentas. Incluso en el hipotético caso de que dos jueces colocados uno al lado del otro emitieran diferentes opiniones sobre el marchar del mismo atleta en el mismo tramo de la carrera, ambas serían igualmente correctas. Un marchador puede marchar bien y mal a la vez.
1 comments:
Gracias por el comentario. Tu también estas en otro nivel. El del Ultrafondo
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