miércoles, 1 de octubre de 2008

500 millas en seis días: tiempos de paso

Sigo ordenando la información que he ido recopilando estos días sobre la prueba de los Seis Días de Marcha. De paso, también entreno. Ayer, cinco kilómetros

El orígen de la prueba hay que buscarlo en los intentos en solitario de Edward Payson Weston de recorrer 500 millas (804km) en menos de seis días, períódo máximo que se podía dedicar uno exclusivamente a algo sin quebrantar el precepto dominical. Después de varios fracasos, Weston consiguió su objetivo en el Washington St. Rink de Newark en diciembre de 1874. Su tiempo (hay distintas versiones) fue de 5 días 23 horas y 38 minutos. Un total de 6.000 espectadores, entre ellos el alcalde y el jefe de policía estuvieron presentes.

Al año siguiente, en el mes de septiembre, Daniel O'Leary lo intentaba también en el West Rink de Chicago. No consiguió batir la marca de Weston (de hecho, se pasó en once horas del límite), pero logró forzar la resistencia de Weston. El desafío se celebró en Chicago el mes de noviembre y sorprendentemente se saldó a favor de O'Leary.

En 1876 ambos marchadores se dedicaron a realizar exhibiciones en solitario sobre diversas distancias y algún que otro bolo más. O'Leary llegó a enfrentarse en Saint Louis durante seis días a dos hombres que se relevaban cada 24 horas. O'Leary cubrió 513 millas por 496 sus rivales. En agosto de ese mismo año, en el American Institute de Nueva York, cubrió las 500 millas en 5 días 23 horas y 20 minutos.

A esa prueba pertenecen los tiempos de paso que se reproducen en la ilustración y que están extraídos de la edición del New York Times del 13 de agosto de ese año.

2 comments:

Anónimo dijo...

Yo no creo que con una paliza de tantos días,tengan el porte que aparece en el grabado.Esto tiene mucho de romanticismo,exaltación y nacionalismo en una época de exploraciones y descubrimientos.A veces me pregunto si estas marcas son reales o es el timo de la estampita.Pero que tíos más bestias.

bjosemora dijo...

El grabado corresponde a la prueba que se hizo en Nueva York en 1879. Ya no era de marcha realmente, sino "go as you please".