Ahora que los Seis Días vuelven a ser actualidad, revisando viejas carpetas, rescatando algún libro medio perdido en las estanterías y empleando el google, durante este fin de semana he conseguido reconstruir más o menos la historia del nacimiento de esta prueba. También he hecho diez kilómetros el sábado y otros tantos el domingo.
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Aunque Weston se mostró en principio muy reacio a aceptar el reto, acusando a su rival de estar todavía "muy verde", acabó cediendo. La pista, de poco más de 200 metros, se dividió en dos paralelas, de manera que Weston y O'Leary no se encontrasen jamás codo con codo. Weston caminó por la pista interior y O'Leary por la exterior. Finalmente, tras 144 horas de marcha, se impuso O´Leary, que recorrió 810km (503 1/3 millas) por 726,7 (451 4/7 millas) de su rival, lo que le llevó a autoproclamarse "campeón del mundo".
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Como O'Leary seguía autoproclamándose campeón mundial a pesar de haber solo ganado a Weston (que no era poco), sir John Astley, conocido deportista (era un antiguo sprinter) y miembro del Parlamento, decidió patrocinar un verdadero campeonato del mundo que reuniera a los mejores atletas de larga distancia de ambas orillas del Atlántico. Asimismo, y toda vez que el juzgamiento de la regla del "heel and toe" provocaba algunos problemas -el estilo de Weston era considerado un tanto dudoso-, Astley decidió que las competiciones se disputaran bajo la norma "go as you please" (estilo libre). A partir de este momento, las pruebas exclusivamente de marcha dejaron prácticamente de disputarse.